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Un poco de historia sobre el cannabis en Ecuador

Al momento de empezar a escudriñar en el pasado de la planta de cannabis, aparecen una serie de eventos claves que destacan dentro de su análisis histórico en el Ecuador. En el presente escrito se van a exponer las evidencias del uso de marihuana antes de la primera mitad del siglo XX en el país.

Dentro de la sociedad ecuatoriana anterior a la primera mitad del siglo XX, existen dos evidencias o pistas que son de consideración[1]. La primera es la aparición de destacados literatos que se conocieron con el nombre de “La Generación Decapitada”, los mismos que tenían influencias de “Los Poetas Malditos” de Francia. Se sabe que los escritores ecuatorianos, igual que sus pares franceses, experimentaron con substancias que cambian la conciencia, especialmente morfina, pero podría pensarse que, en algún momento, pudieron probar cannabis (Tenorio, 2014[2]).

Luego de algunas décadas, existe otra evidencia muy importante del uso de cannabis, que se encuentra en la letra de una canción denominada “Ojos que matan”, interpretada por Julio Jaramillo; sin embargo, el “Ruiseñor de América” no fue el creador del mencionado pasillo. La canción “Ojos que matan” se creó en los años cuarenta, Ignacio Emilio Piedrahita Cabello, la habría escrito en 1.943 y se la envió a Nicasio Safadi para que le ponga la música” (Conversación personal vía chat con Roberto Calero, nieto de Ignacio Emilio Piedrahita, quien escribió el pasillo “ojos que matan”, 8/09/2016).

En una próxima oportunidad, se expondrá más información sobre el uso de cannabis en la segunda mitad del siglo XX, posibilitando entender la influencia de las corrientes contraculturales que tuvieron un impacto dentro de la visión de buena parte de aquellas generaciones jóvenes y adultas sobre la marihuana. La necesidad de mostrar las evidencias anteriores a la década de los sesenta, aparece para exponer que sí existió un consumo anterior a su uso por parte de miembros de colectivos, agrupaciones, o culturas urbanas de los sesenta, que posibilita ampliar el escenario de estudio sobre el uso de la planta de cannabis de forma lúdica.


[1] Se debe señalar que no se ha encontrado mayor información sobre la posibilidad de que la llegada de jamaiquinos para la construcción del famoso tren que unía a la costa y a la sierra, culminando con su entrada a la estación de Chimbacalle de Quito en 1908, demuestre un consumo de cannabis, pero tampoco se niega que pudiera haberse dado, dejando la puerta abierta a la posibilidad de que el uso del cigarrillo de marihuana empiece durante los primeros años del siglo XX.

[2] Tenorio, Rodrigo, Ecuador y la marihuana. 2014.

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